Concurso
Siempre me gustaron los chismes históricos. Los amores de Bolívar –aquellos con los que nos motivaba a escuchar sus clases una experimentada profesora en la Universidad de La Habana- , las infidelidades de Josefina y la forma en que Napoleón “se hacía el sueco”; las tribulaciones de María Antonieta, tan incomprendida y vulnerable.
Sí, porque la historia la hacen los hombres y su vida personal es decisiva en esos avatares.
Pues bien, parece que hijo de gato caza ratón, y también mi hija de 14 años heredó alguillo de esa curiosidad.
Ayer se apareció con la buena nueva de que quedó entre los seis mejores alumnos de noveno grado en el concurso de Historia de Cuba. Su secundaria básica tiene siete grupos de noveno grado, cada uno con 30 alumnos y dos profesores frente al aula.
Los éxitos de los hijos nos alegran más que los nuestros. Y no es que pondere sus virtudes –como siempre hacemos los padres-, pues también conozco muy bien sus debilidades, algo desordenada en el interior de la casa, si bien es impecable con sus libros y libretas –paradojas de la vida-.
Soy del criterio de que todo país que se respete debe enseñar muy bien su propia historia –además de la universal- La historia es la clave para desentrañar el ayer y entender el futuro.
En un blog solidario con Cuba leía hace poco que para entender sus razones hay que conocer su historia, y no le falta razón.
En estos días mi muchachita andaba para arriba y para abajo con el libro Crónicas de la guerra, un apasionante volumen escrito por José Miró Argenter, jefe del Estado Mayor del Ejército Invasor, quien relata en detalles todos los acontecimientos de la invasión hasta la muerte de Antonio Maceo a manos del ejército español.
Se trata de un relato ameno, lleno de anécdotas y episodios que hacen del libro una lectura agradable.
De quien mejor aprender que de los grandes hombres, esos de los que heredó la nación un cuerpo armónico de principio y de una ética a toda prueba.
¿De qué manera profundizar en las raíces de un pueblo si no es conociendo su historia?.
Y aquí está la tropa de Maceo gracias a la pluma de Miró Argenter :
“...Trata de flanquear una compañía, pero se le opone firme resistencia desde el descuello de la loma; y tiene que replegarse. Parece que el centro de la columna se ha retrasado, puesto que se oyen los toques de corneta bastante lejos, sin que pueda distinguirse si ordenan despliegue de guerrillas, o marcha de frente, o retirada. En esta situación toda la vanguardia española se arrima a un lado del sendero y dispara a granel, pero sin tino. Es de admirar, sin embargo la manera como ha ejecutado el retroceso....
4 comentarios
Zenia -
ESTOY DE VUELTA.LA PASÉ BIEN.
BLANCA.¡BIENVENIDA¡ LA HISTORIA SIEMPRE NOS DICE POR QUÉ ESTAMOS EN ESTE LUGAR Y NO EN OTRO. ESPERO QUE TE HAYA IDO BIEN LA ENTREVISTA DEL PASADO JUEVES. UN ABRAZO.
¡ROSAAAAA¡. ¡QUÉ BUENO QUE NOS REENCONTRAMOS. YO TAMBIÉN TE BUSCARÉ SIEMPRE. EN ESTOS DÍAS TU NACIÓN VIVE TIEMPOS MUY DIFÍCILES Y CONVULSOS¡.
MARCARLOP:GRACIAS POR LA VISITA. ESPERO TENER UN NUEVO ADICTO A ESTE CÍRCULO NO EGOCÉNTRICO. CIERTO LO QUE DICES. PARA QUE HAYA UNA VERDADERA COMUNICACIÓN LO PRIMERO ES ESCUCHAR. LO CONTRARIO ES UN MONÓLOGO. TE VISITARÉ. VUELVE PRONTO.
marcarlop -
Conocer la historia de los países, de los pueblos, de las naciones, de las personas... ayudan a entenderlos. Estamos demasiado acostumbradas a hablar sin molestarno ni un ápice a escuchar primero.
Un abrazo
Rosa -
Blanca -