Por Zenia Regalado
Shakira – la colombiana- era trigueña, vestía y se proyectaba acorde con su país de procedencia y con sus ascendientes árabes. Pero tuvo que cambiar al irse a vivir a Estados Unidos.
Los requisitos del mercado en Gringolandia tienen una bien diseñada estrategia de estereotipos, a la cual no escapa la construcción de lo femenino: mujeres rubias, altas, delgadas y seductoras. Lo negro, lo indígena y todos los matices autóctonos quedan fuera, salvo excepciones.Recuerdo el caso de una cubana que abandonó la isla para vivir en Estados Unidos y a la cual quisieron imponerle que dejara a un lado sus canciones campesinas. Son las exigencias del mercado, ni tan tonto ni tan neutral, como algunos intentan afirmar.
La colega Isabel Moya, una estudiosa cubana del tema género y comunicación, trazaba con singular ironía ese mundo que envuelve a muchos sin que apenas se den cuenta.
Ella hizo referencia a una receta para construir una mujer global: tome unas gotas de Amarige de Givenchy; un poco de cremas antiarrugas de Clinique; una porción de extracto revitalizante para el cabello de L’ Oreal, mézclelo cuidadosamente para que no haga grumos; distribúyalo sobre un cuerpo femenino de 1.80 metros con 90, 60, 90 centímetros de pecho, cintura y caderas, respectivamente. Cuézalo a fuego lento en un caldo con algo de consumismo, fin de las ideologías, la historia y otras yerbas.Pues sí, ese es el modelo estándar de mujer de este siglo que circula y se recicla en los medios de comunicación mundiales, incluidas las revistas del corazón, las de modas y de vanidades, y también en los videoclips, en los cuales el empleo de la imagen femenina como gancho erótico es una constante de repetición de los mismos códigos acerca del mal llamado sexo débil.
Me sonreía al comparar esa construcción etérea de lo femenino desde los centros del poder universal hirientemente contrastante con la realidad de América Latina y África, - donde no abundan las rubias delgadas -dos regiones del mundo en las que existen millones de analfabetas que ni siquiera tienen tiempo de mirarse al espejo, pues el tiempo se les va buscando el sustento para los suyos.
Igual mueren ellas allí de SIDA y múltiples enfermedades curables, o empujadas a realizarse abortos clandestinos con personas sin preparación y en lugares sin condiciones de salud.
Los medios de comunicación tienen una altísima cuota de esta invisibilidad femenina, y de reciclar las mismas formas de reflejarla.
No sólo la discriminación masculina es responsable de esta situación, también intervienen valores arraigados en la sociedad, y claro está, en las propias mujeres, uno de ellos es repetir sus roles de siempre en la familia, y sobre todo como centro de la educación de los hijos, cuando deben ser tareas compartidas en las que también se incluya la paternidad consciente.Existen muchísimas otras áreas de la vida en las cuales lo femenino está presente, pero queda en la oscuridad, y dentro de ellas está la eficacia, la profesionalidad; el tesón por superarse, la participación en los cambios sociales que tienen lugar por ejemplo en América Latina, algo en lo que Telesur está haciendo una mayor justicia.
En este canal del Sur aparecen negras, mulatas, indias participando en transformaciones como la alfabetización y el desarrollo de nuevos programas destinados a la inclusión social.
Cuba, que construye una sociedad socialista que institucionalmente trabaja por la igualdad, tiene realidades notoriamente diferentes; pero aún en los medios del patio mayoritariamente los hombres aparecen como portavoces de todos los saberes, aún cuando se abordan temas relacionados con la educación y la salud pública, sectores en los que la mujer representa una amplia mayoría.
La preparación de los profesionales de la comunicación en temas como el enfoque de género, que se ha retomado en los últimos tiempos, es una urgencia para lograr una mayor visibilidad de la mujer en el quehacer social.
Un recién finalizado diplomado internacional de Género y Comunicación, auspiciado por la Unión de Periodistas de Cuba y el Instituto Internacional de Periodismo José Martí – con una representación pinareña - abordó esos y muchos otros temas relacionados. Es un buen camino: entrenar para después comunicar.
A propósito de la telenovela cubana La otra cara de la luna – magnífica movilizadora de ideas, por provocativa y valiente- he escuchado dos criterios masculinos inconformes con el personaje de Rolando, el padre de Amanda, interpretado por Fernando Echavarría.
Las opiniones en cuestión aseveran que a “Rolando la mujer le pasa el pie” porque lo pone a escoger frijoles y a hacer otras tareas.
En mi opinión no hay nada gratuito en la delineación de ese personaje masculino, que no es bebedor –un cliché en casi todas las propuestas televisivas- ; tampoco es el tipo duro a lo Bruce (Lee, Willis ), y mucho menos un “papi riqui” enemigo de la estabilidad hogareña.
Veo en ello una mirada que busca la inclusión paterna en los temas más candentes de la realidad cubana.
Son para bien estos nuevos modos que no olvidan las mejores huellas del pensamiento cubano, entre ellas aquel martiano expuesto en La Edad de Oro, cuando el Maestro afirmó que para los niños y también para las niñas se hacía aquel periódico.
11 comentarios
Isa -
zenia -
Adalys y yo estamso muy tristes, conversábamos ayer, pues no podemos acceder a tu pàgina, mientras nos consolamos con mantener este puente contigo. Esperemos que blogspot.com se desbloquee de una vez.
Isa -
almena -
un beso Zenia
Kanaima -
Saludos.
Noamanda -
Perdone, pero no pude por menos q decirlo.
Gracias por invitarme amiga...qué te puedo decir, que no hayas dicho tú ya...
Puse en mi blog el poema de una Sra cubana que leí este verano.
Pásame mujeres definitorias en cuanto a la Hª de Cuba, vale?¿
Aunque sea su nombre, yo luego las busco y me las estudio.
Cuando tengas un momentito claro.
Besos y
Saluditos a todos
antropomorfo -
adalys -
Fuiste a ECOMUJER?, quiero estar ahí mañana. besos, Adalys
Ah, Rocinante hizo un dibujo para todas las mujeres del mundo, mañana lo publico, verás que lindo.
Adalys
zenia -
pàgina,me sale el aviso de que està fuera de servicio.
Què fastidio.
zenia -
tu letra tiene filo,así es, es
elmodelo de la idiotizaciòn,es otra forma de
esclavitud.
Zuriñe -