SOLO PARA MUJERES: SEXO PROTEGIDO
Mucho se habla en los últimos tiempos entre las mujeres acerca del cáncer cérvico uterino, que persiste como un problema de salud no resuelto a nivel mundial.
Después del cáncer de mama, el citado es el más frecuente en el sexo femenino y ocupa el séptimo lugar entre todas las neoplasias malignas que afectan a ambos sexos.
Su mayor incidencia es en las mujeres con edades comprendidas entre los 40 y 50 años. Cada año son diagnosticados 437 000 casos nuevos a nivel mundial, y, aproximadamente, la mitad muere.
La causa de la aparición del cáncer de cuello uterino se estudia desde hace 150 años.
Su etiología es aún desconocida, aunque se asocia a varios factores de riesgo. Se presenta con mayor frecuencia en mujeres que han comenzado la actividad sexual precozmente, con embarazos a temprana edad.
Aseveran los expertos que la vida sexual activa aumenta la frecuencia de la enfermedad de forma importante, sobretodo en aquellas mujeres que la inician antes de los 12 años.
La promiscuidad, sin ser sinónimo de cáncer de cérvix, parece ser el factor de riesgo de mayor importancia.
Existen otros factores que son mencionados como riesgos de padecer la enfermedad, como la transmisión de agentes infecciosos (trichomonas, Gardnerella, Herpes virus tipo II [HSV-2], clamidia).
A veces, y lamentablemente la naturaleza castiga a las mujeres. Una de las hipótesis que exponen numerosos ginecólogos al ser consultados sobre el tema señala que el agente causal son los carcinógenos presentes en el semen masculino, proteínas específicas que alteran las células epiteliales y subepiteliales e inducen transformación neoplásica.
En este punto cobra aún mayor relevancia como método preventivo el uso del condón, una práctica que aunque en Cuba se difunde por todos los medios sigue sin tener la aceptación necesaria, pues es considerada aún por muchos como un acto de desconfianza.
Muchos especialistas califican el período entre los 25 y 59 años en las mujeres como de riesgo para padecer dicho cáncer, de ahí el programa de salud pública en Cuba, existente desde 1968 para que las féminas se realicen la prueba citológica, la primera a partir de los 25 años y después repetirla sistemáticamente cada tres años.
En el caso de al isla, quienes están al frente de dicho programa afirman que no existe ni una sola causa para que en la nación muera una sola mujer por esta causa, debido a las facilidades que se brindan para la realización de la prueba citológica con al periodicidad requerida.
La vagina está expuesta a adquirir una amplia gama de infecciones provocadas por relaciones sexuales con personas infectadas, también sufre numerosas manipulaciones relacionadas con distintos procederes dentro del útero, como dispositivos intrauterinos, legrados por diferentes causas y en propio parto.
El tumor benigno más frecuente del útero es el fibroma, como causa fundamental se cita el exceso de estrógenos.
El tumor maligno más común del útero es el cáncer del cuello, y en estos momentos se considera que, entre otros, la infección por el virus del Papiloma es el factor principal de su aparición.
Los síntomas más frecuentes cuando dicho cáncer se encuentra en etapas avanzadas son el sangramiento por la vagina, la secreción de un flujo sanguinolento con fetidez y dolor en la zona pélvica.
Afirman los expertos que siempre que el cáncer se diagnostica en etapas precoces se puede asegurar prácticamente un 100% de curación.
En dependencia de la etapa en que haya sido diagnosticado, existen diferentes métodos de tratamiento: electrofulguración, criocirugía, electrocirugía, distintas técnicas quirúrgicas y la radioterapia.
Más información respecto al tema:
Revista Cubana de Medicina - Cáncer de cuello uterino: aspectos ...
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